Notimex Foto UNAM
México. En Ciudad Universitaria, así como en 160 facultades, institutos y preparatorias de la casa de estudios, el macrosimulacro de sismo se desarrolló conforme a los parámetros establecidos para el desalojo de inmuebles, en la mayoría de los casos en menos de un minuto.
De manera puntual funcionarios, trabajadores y brigadistas iniciaron la evacuación de la Torre de Rectoría por la puerta principal y el sótano para llegar en 45 segundos, en promedio, a las zonas de seguridad establecidas.
La alerta sísmica recordó a la comunidad universitaria lo ocurrido hace dos años y los alumnos abandonaron en orden las facultades de Medicina, Química, Derecho y Filosofía y Letras, entre otras.
En la Facultad de Química, donde hay laboratorios en un edificio de hasta tres pisos, la operación duró hasta tres minutos por el gran número de estudiantes y la escasez de escaleras alternas.
30 perros rescatistas
Baco es un pastor belga que todos los días entrena y recorre las áreas verdes de Ciudad Universitaria (CU), y junto con otros 29 perros forma parte del grupo de rescate canino que ha participado y salvado vidas en los sismos de 2017 y en otras contingencias ocurridas en el país y el extranjero.
Esta comunidad canina es adiestrada por 28 estudiantes voluntarios, quienes todos los días realizan actividades de capacitación y simulacros para estar preparados no solo ante sismos, sino también por inundaciones, explosiones y otras tragedias.
Baco ya es parte de la comunidad puma y ha viajado a Japón para apoyar en labores de rescate; junto al resto de los perros, también participó en los rescates de los sismos de 2017, en el Colegio Rébsamen, en la calle de Coquimbo, en Lindavista, en Chimalpopoca y en el Centro Histórico, entre otros sitios.