El acróbata mexicano Jerónimo García Cabral se mantiene como una de las estrellas de la compañía canadiense Cirque du Soleil, que presenta espectáculos en todo el mundo, y en la que el artista circense ha consolidado su carrera.
En charla con Notimex, García Cabral habla de su insipiente paso por la gimnasia olímpica, la casual incursión en el mundo artístico, donde participó en teatro musical, hasta los avatares de una audición de 11 horas, para integrarse a una de las compañías de espectáculos más importantes a nivel mundial.
El artista compartió que su primer sueño como atleta, cuando pertenecía al equipo olímpico de gimnasia, se vio frustrado por circunstancias ajenas, más políticas y de grilla, pero que esto lo llevó de manera fortuita al teatro, donde actúo en comedias musicales, obras de teatro y comerciales de televisión.
Después de esa primera experiencia, “descubrí, de rebote, las artes circenses aplicadas al espectáculo, luego conocí al Cirque du Soleil y lo que hacían me parecía cosa de extraterrestres; sin embargo, pensé que si me preparaba podía lograr eso que nadie había conseguido”.
Originario de Mérida, Yucatán, donde nació hace 44 años, Jerónimo cuenta cómo fue el proceso para integrarse a la compañía circense. “Fui el primer mexicano en Cirque du Soleil, me integré en 2002. Me enteré que estaban haciendo casting y me ‘colé’, sin tener invitación”.
“Llevé mi demo y pedí una oportunidad. Después de una audición de 11 horas y media, la mejor experiencia de mi vida, me dijeron el clásico ‘nosotros te llamamos’ y sí, me hablaron dos semanas después. Así arranqué mi carrera con el «show» Zumanity, en el que estuve seis años, presentándome en Las Vegas”, señaló.