El gobernador Luis Miguel Barbosa Huerta explicó que, a diferencia de las actuales, las nuevas placas tendrán grabados y medidas de seguridad que permitirán identificación del vehículo y propietario, a través de los lectores con los que cuentan las cámaras instaladas en el estado, algunas de ellas en los arcos de seguridad.
Con la finalidad de integrar, de manera paulatina, un padrón vehicular confiable y acreditado que permita atender cuestiones de movilidad, y sobre todo de seguridad pública, el Gobierno del Estado iniciará en 2020 un reemplacamiento para la totalidad de vehículos en la entidad, informó el gobernador.
Barbosa señaló que lo anterior servirá para atender cuestiones de movilidad, de vialidad y seguridad en beneficio de los poblanos.
«El reemplacamiento es general porque no existe un registro confiable de los autos que circulan en nuestro estado, tiene razones principales de seguridad, hoy no tenemos para cuestiones seguridad pública, de vialidad, de movilidad, un registro de tránsito. Todo se pervirtió, entonces tenemos que hacer un reemplacamiento general».
El gobernador indicó que este cambio se llevará a cabo una vez estén dadas las condiciones para cristalizarlo.
De acuerdo con disposiciones federales, la vigencia de las placas debe ser de tres años y en Puebla desde 2014 no se realiza algún cambio.
El valor de la nueva placa ascenderá a 965 pesos. Para complementar ese trámite, la administración estatal entregará la tarjeta de circulación sin ningún costo.
Barbosa Huerta explicó que las actuales placas, provenientes de las pasadas administraciones estatales, no reflejan ni arrojan ninguna información de los propietarios de los vehículos:
«Son placas que no sirven, son placas de lata, si tú le pasas un lector no dicen nada.”
Foto de Francisco Guasco y Martha Gutiérrez / El Heraldo de Puebla