El pasado 7 de octubre de 2021, la Fiscalía Alemana inició un juicio en contra de Josef Schuetz, exguardia nazi de 100 años de edad.
Schuetz está acusado de colaborar con conocimiento y de forma voluntaria en el asesinato en las cámaras de gas de 3 mil 518 prisioneros del campo de concentración de Sachsenhausen, ubicado al norte de Berlín. Los crímenes sucedieron entre 1942 y 1945, informó Tribuna Israelita.
Las acusaciones en su contra incluyen también ayudar e incitar a la ejecución de prisioneros de guerra soviéticos.
A pesar de su avanzada edad, una evaluación médica en agosto de este año encontró que Schuetz estaba en condiciones de ser juzgado, aunque el tribunal de Neuruppin limitará sus audiencias a un par de horas al día.
Este juicio forma parte de los intentos de los fiscales alemanes por llevar a la justicia a los últimos perpetradores nazis que quedan con vida y que a pesar de no haber ocupado altos mandos en el ejército del Tercer Reich o realizado los asesinatos de forma personal de alguna manera en sus cargos y por omisión fueron cómplices formando parte de la maquinaria de matar de Hitler.
De acuerdo a archivos periodísticos, así fue el caso de Oskar Groening, un Contador y de Reinhold Hanning, un ex Guardia de las SS, ambos en Auschwitz, quienes fueron condenados a la edad de 94 años por complicidad en asesinato en masa, pero murieron antes de que pudieran ser encarcelados.
Más recientemente se registró el caso del ex Guardia de las SS Bruno Dey quien fue declarado culpable a los 93 años el año pasado y recibió una sentencia condicional de dos años.
Actualmente, de acuerdo a la Oficina Central de Investigación de Crímenes Nacionalsocialistas, los fiscales alemanes se encuentran investigando otros ocho casos más, que esperan poder llevar a la justicia a tiempo.
Periodista. Catedrática de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la BUAP. Pionera en Puebla de noticiarios y programas de radio con perspectiva de género desde 1997.