El gobernador Luis Miguel Barbosa dijo que está al pendiente del desarrollo de las investigaciones que realiza la Fiscalía General del Estado para dar con la identidad de los padres biológicos del bebé de seis días de nacido, que apareció muerto y abandonado en un contenedor de basura en el Cereso de San Miguel, hecho que calificó de ‘horroroso’.
Barbosa explicó que las primeras indagatorias señalan que era un bebé que no nació en el interior del Cereso, pero tampoco se sabe cómo fue introducido en el penal.
Otro hecho desconcertante es que presentaba una cirugía en el apéndice.
“Todo ello representa la porquería que vamos a sacar y dar a conocer”.
Foto de Rafael Pacheco