El gobernador Miguel Barbosa, remarcó que sigue muy pendiente del curso que tomen las investigaciones de la Fiscalía General del Estado, en torno al bebé que fue asesinado y abandonado en un contenedor de basura en el CERESO de San Miguel.
El mandatario lo calificó de un “ hecho satánico” que será investigado hasta las últimas consecuencias y, en este sentido, corre la versión extraoficial de que el cuerpo del bebé de 6 días de nacido habría sido utilizado para introducir droga al penal de San Miguel.
Foto: Archivo El Heraldo de Puebla