El gobernador Miguel Barbosa admitió haber sido engañado por los tres anteriores secretarios de Seguridad Pública, que nunca cumplieron sus órdenes de destruir ‘el Pueblito’, un área de 100 dormitorios con privilegios para internos que podían pagar prostitución, drogas y comodidades.
El gobernador informó que el pasado jueves concluyó la demolición de los últimos dormitorios y espacios del Pueblito ante la sorpresa de algunos internos de reciente ingreso que ya pedían su ‘suite’ en el espacio.
Foto de Alberto Melchor / Agencia Enfoque