Edith González ha partido de este mundo, pero no así su recuerdo. De hecho, su hija Constanza la tiene muy presente, tanto que le escribió una emotiva carta de despedida.
Fue Víctor Manuel González, hermano de la recién fallecida actriz quien se encargó de leerla a nivel nacional a través de la señal del programa Ventaneando. “Mi mamá fue una persona formidable, era una excelente madre, nunca tomó como excusa su trabajo para no serlo”, empieza diciendo Constanza.
“De pequeña, me recuerdo que sin importar que tan tarde o cansada llegara de trabajar siempre me daba un beso y, a la mañana siguiente, no le importaba que la levantara a las 6 de la mañana para jugar.
“Siempre hubo un beso sin importar la hora, al igual, que nunca tomó el ser buena madre para no ser una buena en su trabajo. Me acuerdo que siempre me decía algo como: ‘La carta de resignación de un actor es la muerte’ y así lo hizo. A ella le encantaba aprender, siempre que íbamos de viaje era mi guía de turistas y, si no sabía, preguntaba y aprendía. Me llevó a recorrer todo el mundo, Egipto, Galápagos, París, Londres, Cambodia, Vietnam, India, Perú, Colombia, Canadá, Madrid, por mencionar algunos, al igual que la República Mexicana. Recuerdo también cómo me enseñaba películas y, yo a ella, música. Cómo nos echamos 3 mil 500 veces La Novicia Rebelde, por ser mi película y cómo la hice ver El Resplandor y Psicosis y que, ella, era una miedosa”.
