Bárbara Luis
En sus 41 años de trayectoria en la lucha libre, el luchador “Máscara Año 2000” comentó en entrevista para “El Heraldo de Puebla” que su mayor satisfacción fue ganarle la máscara al reconocido luchador “Aníbal”, pero la que más recuerda fue con “El Perro Aguayo”, una apuesta de máscara contra cabellera, magna función con más de 50 mil espectadores en la Plaza de Toros México.
“La lucha que marcó mi carrera fue haber perdido la cabellera con una leyenda como El Perro Aguayo, un luchador que seguiré admirando toda la vida”.
Recordó que de las últimas luchas en las que se enfrentó con “El Can de Nochistlán” fue cuando perdió la cabellera junto a su hermano “Cien Caras”. En esa contienda se enfrentaron contra los perros padre e hijo, dos grandes de este deporte que son recordados y considerados leyendas de los pancracios por la afición.
El consagrado luchador, comentó sentirse orgulloso de sus sobrinos “Cuatrero”, “Sansón” y “Forastero”, la nueva generación de “Los Dinamita”.
Enfatizó que sus sobrinos son los luchadores que van a cambiar el concepto de la lucha libre y tiene esa responsabilidad.
¿Cómo recuerda a su hermano Universo 2000?
Admiro todo del él, éramos cuates de nacimiento, como una misma persona. Estábamos juntos las 24 horas del día cuando estábamos solteros.
¿Cuáles fueron sus mayores rivales?
“El Perro Aguayo”, “Ringo Mendoza”, “Rayo de Jalisco” y “Atlantis”.
¿Qué hace a los Dinamita diferente a los demás luchadores?
Los Dinamita siempre marcamos un sello de lo que es el estilo rudo, un antes y un después. Hemos tenido más victorias que derrotas.
“La afición de Puebla es muy importante, de la más conocedora y de hueso colorado”. concluyó.