Eduardo Torres, especialista del Colegio de Oftalmólogos de Puebla, advierte que la alta concentración de glucosa en la sangre de una persona, puede infartar un ojo y perder la vista.
De ahí la importancia que jóvenes y adultos revisen de manera periódica sus niveles de glucosa en la sangre y adviertan que algo no está bien en su vista, si en sus ojos hay hemorragias constantes donde se observan manchas rojas, producto de venas hinchadas que se revientan por la presión ocular.
La Retinopatía Diabética y el Edema macular Diabético son complicaciones de la vista causadas por la diabetes que muchas personas ignoran que tienen esta enfermedad.
Cuando hay gran concentración de glucosa en los ojos se observan hemorragias sobre en todo en la mácula que es la zona central de la retina. El paciente con este padecimiento, de inmediato notará visión borrosa. Que puede ir de moderada a severa y en función de la gravedad se refleja que el mismo problema lo tiene en la circulación de la sangre en el cerebro, en las arterias coronarias y en su circulación renal.
El momento más grave es cuando los vasos sanguíneos revientan salen del plano retinal y se infarta la retina hasta desprenderse.
No hay medicamentos para su cura, pero la cirugía logra controlar el padecimiento y evitar la pérdida total de la vista.
Foto Theo Fragoso