El alza a la tarifa en el transporte público debe de ir acompañado de modernizar las unidades y mejorar las condiciones de seguridad para los usuarios, consideró Maribel Flores, politóloga del Tecnológico de Monterrey, campus Puebla.
Mencionó que este es un tema muy sensible, que luego de anunciarse la nueva tarifa (8.00 pesos, Urvan; 8.50 pesos, autobús y micros, a partir del 12 de octubre), comienza a generar polémica.
«El transporte público es un tema sensible, porque es un medio en el que el ciudadano se desplaza y evidentemente, se resiente en el bolsillo… el aumento debe ir acompañado por la modernización del parque vehicular y por una regulación en la materia, con el objetivo de tener una política pública integral que se traduzca en un mejor servicio y garantizar las condiciones de seguridad», enfatizó.
Maribel Flores resaltó que ha habido avances en el transporte público, pero todavía es insuficiente, «existe un malestar social respecto al funcionamiento del transporte público».
Vale la pena mencionar que la secretaría de Movilidad y Transporte detalló que tras autorizar el aumento a la tarifa en el transporte público, los concesionarios y transportistas están obligados a que en un lapso de 120 días deben cambiar las unidades, mismas que deben de usar GPS, cámaras de vigilancia y botones de pánico, además de que los choferes sean capacitados y contar con la licencia correspondiente, si no cumplen, la autoridad revocará concesiones y hará retiros de unidades.
Foto Mireya Novo