Roberto Quintero
En esta columna que trata sobre emprendimiento, tendremos una vez al mes a un emprendedor invitado, que nos compartirá su testimonio y sus consejos, en esta ocasión recibimos con gran gusto la pluma de Alejandro Bravo:
CUANDO HAY CRISIS, LO QUE MÁS SE NECESITA ES GENTE EMPRENDEDORA.
Ha sido demasiada la información que se mueve entorno a la contingencia que vivimos, que psicológicamente nos llega a afectar bajo efectos de estrés y frustración. Que, si bien es importante estar enterados de las noticias y el avance de este tema, ya no es viable estar enfocado en la parálisis económica y operativa que ello ocasionó.
Nuestros pensamientos, ideas y próximas acciones deben estar enfocadas a cómo ser parte de la reactivación de nuestra comunidad, ya sea desde el sector social, económico o empresarial.
Dentro de la cultura China, desde tiempos imperiales y de conquista, gestionaban una visión de desarrollo e implementación de sus activos basados en una ideología: los tiempos de crisis son momentos de oportunidades. Con lo cual fueron capaces de crear una de las naciones más fuertes y potenciales que hemos visto. De ahí hemos escuchado mucho la fórmula Crisis = Oportunidad.
Este pensamiento lo hemos adaptado tanto en el ámbito empresarial que lo hemos escuchado en ejemplos como: «mientras unos lloran, otros venden pañuelos». Lo cual expresa un enfoque de oportunidades en nuestros diferentes comportamientos ante una crisis.
Un emprendedor no es sólo un estatus social o de proyecto, es una actitud que cualquier persona puede tener desde cualquier ámbito. Un emprendedor es aquél que siempre mira la situación desde diferente ángulo, que nunca se cansa de buscar maneras nuevas de hacer las cosas, solucionar problemas y de innovar en los mercados.
Ahora, estamos en esos momentos de sacar nuestra alma de emprendedor, de encontrar esa manera de innovar nuestra empresa y de adaptarla al nuevo comportamiento de consumo y de movilidad social. No esperes a que las cosas vuelvan a la normalidad, porque ya no lo harán, aprendamos a vivir con ello y demuéstrale al consumidor cómo poder seguir contando contigo. Es momento de ser emprendedor, de crear nuevos productos y servicios, y de innovar el mercado que vaya de acuerdo a las nuevas necesidades.
Recuerda que la madre de la creatividad es la necesidad. En estos momentos podemos ser tan grandes e innovadores como queramos, que el tiempo nos ha puesto la oportunidad enfrente de nosotros.
En tiempos de crisis, son los momentos en que el mercado se tambalea y es la oportunidad que tu marca tiene para posicionarse y estar al nivel del más feroz competidor que tengas, sin importar el tamaño de tu empresa.
Sin un líder en la empresa, no hay compañía que se sostenga.
Sin una marca líder, no hay mercado que avance.
Ya no es momento de sólo enfocarnos en el presente, trabaja con un equipo que planifique el futuro y ofrece una empresa y un mercado al cual regresar.