Como ya es casi costumbre en este mundo digitalizado donde existen más “creadores de contenido” que diseñadores gráficos, nuevamente exhibieron a una influencer por solicitar gratuidad por un servicio y los internautas no perdonaron el intento de “gorroneo”.
La colombiana Manuela Gutiérrez, que se dedica a documentar sus viajes alrededor del mundo a través de sus redes sociales, decidió buscar un lugar lindo para comer durante su próxima estancia en México y pagarlo bajo el esquema de intercambio: cambalachear comida por menciones y promoción en su insta con más de 84,100 seguidores. Tristemente para ella se topó con alguien que no le vio el valor a la colaboración, el chef mexicano, Édgar Núñez I Magaña (133 mil seguidores en instagram).
A Núñez no le bastó con rechazar y burlarse de la propuesta laboral que recibió por parte de @manuguti95 a través de un mensaje directo en instagram, sino que sin piedad hizo uso del screenshot para llamarla “GORRONA INTERNACIONAL” con un par de tweets ofensivos donde menospreció su cantidad de seguidores y dijo “Jajajaja no sabía que tragar gratis era trabajar”, movilizando así a una buena parte de los más de 200 mil seguidores con los que cuenta el chef en twitter, para volcarse en bromas y ataques hacia la viajera colombiana.
Paradójicamente, @edgarnunezm es un cocinero mexicano que podría ser considerado un influencer de la gastronomía… y los restaurantes donde prepara su arte comestible tampoco necesitan ninguna promoción: SUD 777 (52 mil seguidores), Comedor Jacinta (30, 500 seguidores), Aguafresca (23, 600 seguidores), La Vitrine (21,000 seguidores) y María Dolores (5,460 seguidores).
Y lejos de alabar el buen trabajo que realiza su equipo de community managers, quisiera destacar que, aunque el mismo Chef reconoce que él ha creado contenido para promoción de otras marcas, con muy poco tacto denigró el “trabajo” con el que se mantiene Manuela. Y si pongo la palabra “trabajo” entre comillas, no es porque no lo considere valioso, sino para matizar lo triste que es que para nosotros los Godínez, lo que nos da de comer, no nos hace feliz.
Dicen que en el pedir está el dar, y Manuela de manera muy respetuosa y clara escribió al restaurante para hacer su propuesta, bastaba un NO, igual de respetuoso. Pero no fue así y la influencia que tuvo la opinión de Édgar Núñez viralizó el asunto. “Oportunista”, “abusiva” y “huevona” fueron algunos de los adjetivos más amables que recibió la colombiana. Él, a pesar de ser tan grosero, recibió likes y alabanzas por exponerla.
Ambos pidieron disculpas. Ella por si el Chef sintió que no valoraba su trabajo con su solicitud, él por si no fue caballeroso cuando escribió su tweet, pero no por exponerla, de eso dijo que no se arrepiente. (Todo esto sigue disponible en las cuentas de Instagram de ambos, por si quieren ir a ver el chisme completo).
Pero ya, siendo muy honestos a la mayoría de nosotros los jornaleros, nos causa mucha gracia cuando a un influencer lo exhiben por solicitar cosas “gratis”, o mejor dicho, a cambio de publicidad. Y nos da risa porque en el fondo TODOS quisiéramos ser ellos, a todos nos encantaría que nos obsequiaran ropa, comida o viajes a cambio de nuestra humilde opinión; y en cambio esa tenemos que darla sin que nadie la pida y sin que a nadie le interese… justo como lo hago yo en este momento.
Estemos de acuerdo o no con el proceder de los creadores de contenido, la realidad es que están viviendo el sueño. Y sabiendo que hay marcas “chonchas” mexicanas e internacionales que sí trabajan por intercambio o que incluso pagan por el uso de la imagen, no debemos sorprendernos porque algunos arrobas se atrevan a dar el primer paso… Ya no seamos hipócritas, a muchos de los pocosfollowers no les da pena regatearle el bordado a las artesanas del centro, que pal’ caso es lo mismo o peor.
Digo, personalmente ser llamada “gorrona” sería un pequeño precio que estaría dispuesta a pagar con tal de que me regalaran tres noches todo incluido en Cancún -por si a alguien le interesa- y ya no te hagas, tú también lo pagarías.
Hasta aquí el chisme, lo viral, el tamal con crema… y también con pasas.