El náhuatl es patrimonio cultural de México. Es identidad. Es un valor que no debe perderse.
La estudiante de la Licenciatura en Administración y Dirección de Pymes, en la Facultad de Contaduría Pública de la BUAP, Yulissa Herrera Martínez, habla el náhuatl, lengua originaria que la representa y que le gustaría compartir con sus compañeros.
Originaria del municipio de Huatlatlauca, cuyo significado es “lugar montuoso donde el agua se tiñe de rojo”, se ubica en la Mixteca poblana, allá un 84.66 por ciento de la población es indígena, un 56.21 por ciento habla una lengua indígena y sólo un 0.47 por ciento habla una lengua indígena y no sabe español.

Refirió que Huatlatlauca es una pequeña localidad situada al centro de la entidad, cuya población es de 854 habitantes, de los cuales, 395 son hombres y 459 son mujeres, un 14.64 por ciento de la población es analfabeta (un 6.84 por ciento de los hombres y un 21.35 por ciento de las mujeres) y el grado de escolaridad es de 5.05.
Herrera Martínez, cursó en su comunidad la primaria en náhuatl, una lengua que todos hablan en su casa, desde sus abuelos hasta sus hermanos, y sigue siendo el medio de comunicación con los suyos.

Yulissa puntualizó que algo presente en su vida, es una frase que le transmitió en náhuatl su abuela: “Suéñalo, deséalo y hazlo”. Hoy lo repite en su idioma originario como propósito diario para alcanzar sus metas.