El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó este martes que es una ‘vergüenza’ que él y su entorno cercano fueran blanco de espionaje en el pasado con el software Pegasus, de acuerdo con una investigación publicada ayer, pero dijo que no presentará ninguna denuncia por ese caso.
El primer mandatario dijo que no solo él fue blanco, sino su esposa Beatriz Gutiérrez Mueller, sus hijos y hasta su cardiólogo.
AMLO recordó desde Palacio Nacional que ‘ha sido víctima de espionaje’ desde los tiempos de Miguel Nazar Haro, titular de la Dirección Federal de Seguridad, quien ordenó en 1979 que agentes gubernamentales espiaran a López Obrador cuando era líder del Instituto Indigenista.
Demuestra AMLO que ha sido objeto de espionaje desde los tiempos de Miguel Nazar Haro extitular de la antigua Dirección Federal de Seguridad bajo la presidencia de José López Portillo. pic.twitter.com/nbGgzJGGS1
— Jorge Armando Rocha (@rochaperiodista) July 20, 2021
AMLO resaltó que la administración que encabeza ya no espía ni a la oposición ni a defensores de derechos humanos.
Familiares y colaboradores del presidente López Obrador habrían sido espiados telefónicamente entre 2016 y 2017 mediante el software Pegasus adquirido por el Gobierno de Enrique Peña Nieto, reveló ayer un medio que investiga la trama.
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Las interceptaciones con el software malicioso, suministrado por la firma israelí NSO Group, se produjeron cuando AMLO lideraba la oposición al mandatario Enrique Peña Nieto (2012-2018), según el sitio web Aristegui Noticias.
Entre las personas cuyos teléfonos fueron intervenidos figuran Beatriz Gutiérrez Mueller, hijos, hermanos y hasta el cardiólogo del gobernante izquierdista -en el poder desde diciembre de 2018.
También la jefa de Gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, ministros y otros funcionarios del actual gobierno.
El diario británico The Guardian informó el lunes que el círculo más próximo al mandatario, periodistas y políticos, fueron objetivos potenciales de vigilancia por parte de un cliente gubernamental de la empresa israelí NSO Group entre 2016 y 2017, antes de llegara al poder.
Con información de El Economista
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