Al británico David Bowie nadie puede quitarle la etiqueta de estrella del rock, pero reducirlo solo a eso no le hace justicia. El documental «Moonage Daydream», estrenado en Cannes, retrata con imágenes inéditas a un artista polifacético, que se retaba constantemente a sí mismo.
Detrás de ese ambicioso propósito está el cineasta estadounidense Brett Morgen, que recibió por primera vez la autorización del patrimonio y la familia de Bowie y tuvo acceso a unos cinco millones de documentos, incluidas grabaciones, ilustraciones y diarios, que le costó cuatro años filtrar.
«Me involucré en esto con un respeto enorme hacia David como artista y lo acabé con un gran respeto hacia él como hombre. Sabía que era un músico y un compositor increíble, pero no tenía ni idea de que era alguien tan extraordinario», dijo a EFE este martes el también autor de «The Kid Stays in the Picture» y «Kurt Cobain: Montage of Heck».
En su documental es el propio Bowie (1947-2016) quien se explica a sí mismo. Sus entrevistas y sus reflexiones sirven para entenderlo como artista y como persona y para ver una evolución que él abrazó de forma constante.
Soy un coleccionista de personalidades
David Bowie
EFE | Foto: EFE