No es tiempo de futurísmos políticos, sino de trabajar desde el Congreso de la Unión para frenar los excesos que se quieren cometer desde el Ejecutivo Federal para desparecer a los órganos autónomos que son garante de la democracia y un contrapeso para el hiperpresidencialismo que se quiere instaurar.
Pero antes de pensar en otro cargo de elección popular, estoy comprometida al 100 por ciento en cuerpo y alma a mi quehacer legislativo como diputada federal y vicecoordinadora del Grupo Parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados.
Tenemos grandes pendientes. Desde el Poder Legislativo debemos de impulsar un marco jurídico que atienda los grandes problemas que prevalecen en nuestro país como la inseguridad, el combate a la pobreza, el fortalecimiento del sector salud y la estabilidad de las finanzas públicas.
En el PRI como auténtica oposición que somos, seguiremos siendo firmes en rechazar cualquier acción legislativa que atente contra las instituciones, el desarrollo y bienestar de las familias, y que vaya en detrimento, de la seguridad y la calidad de vida de la población.
Desafortunadamente, el gobierno federal no está actuando, ni está preparando para hacer frente a los grandes desafíos globales.
Han sido infructuosas las políticas de contención de la inflación, con la consecuente carestía de vida para los hogares, así como el subsidio a las gasolinas, que más que una medida económica, ha resultado ser una medida demagógica, con poco impacto social y altos costos para las finanzas públicas.
Durante este gobierno el Producto Interno Bruto (PIB) ha caído a niveles negativos y la insuficiente acción del Gobierno Federal no ha favorecido una más rápida recuperación.
Para el próximo Periodo Ordinario de Sesiones continuaré insistiendo, en la importancia de priorizar la atención en los temas que demanda la ciudadanía como: salud, educación, seguridad, cuidado del medio ambiente, la protección de nuestros hermanos migrantes, que se han visto obligados a salir en busca de mejores oportunidades en otros países.
No es válido, que en este gobierno, en un afán de evadir la realidad, se culpen a otras administraciones o se propongan soluciones simplistas.
Desde la Cámara de Diputados seguiré luchando por la defensa de nuestros derechos: de libre expresión, de asociación, de creencias, de actividad política, por el ejercicio del voto, así como el derecho a la propiedad y de comercio.
Estoy convencida, que para mantener el sistema legal que ha dado paso a la democracia, y se logren preservar las libertades fundamentales, es necesario sostener un real equilibrio de poderes y contar con un estado fuerte.
Seguiremos defendiendo la autonomía del Instituto Nacional Electoral y nos opondremos a cualquier cambio que vulnere su autonomía.
Siempre he dejado claro que desde cualquier trinchera en la que me encuentre siempre trabajaré en beneficio de México y de mi estado. No descarto y nunca rechazaré la oportunidad de seguir sirviendo a mi país.
Soy una mujer de convicciones, creo firmemente en que la oportunidad de servir a México es el mayor compromiso que se puede asumir y este debe atenderse con la mejor preparación y desempeño y no solo con las mejores intenciones.
Blanca Alcalá Ruiz
Vicecoordinadora del Grupo Parlamentario del PRI en la Cámara de Diputados