Beatriz Manrique, secretaria del Medio Ambiente, pidió a la población no hacer caso de la publicidad que manejó en aquel momento el gobierno de que los poblanos ya podían sacar sus trajes de baño para poder nadar en la presa de Valsequillo.
Esto lo sacó a colación porque informó que en la actualidad, para el Gobierno del estado representa una pesada carga financiera pagar el mantenimiento de tres barquitos que compró con un altísimo sobre costo, para supuestamente sanear la presa de Valsequillo.
Explicó que estos barquitos inyectan ozono para provocar la hiperoxidación del agua y con ello, eliminar el lirio acuático.
La tecnología si está probada científicamente, pero dado la dimensión de la presa, los tres barquitos realizan la limpieza de una superficie mínima, que, generalmente es en la ribera.
El trabajo de estos barquitos, permite eliminar moscos, y mal olor de el agua que contiene la presa, pero la superficie saneada es mínima, por lo tanto la presa no es recomendable para nadar.