El cierre definitivo de 900 negocios en el primer cuadro de la ciudad por el COVID-19 provocó la pérdida de 3 mil 600 empleos, informó el presidente del Consejo de Comerciantes del Centro Histórico, José Juan Ayala Vázquez.
El presidente del Consejo reveló que la suspensión de actividades laborales por la emergencia sanitaria ha tenido un impacto negativo en las finanzas de los dueños de los negocios en el centro histórico por la falta de ventas y el pago de rentas así como salarios.
Ayala Vázquez resaltó que estos empresarios se declararon en quiebra por lo que estos empleos que generaban no se podrán recuperar cuando existan mejores condiciones para volver a la actividad comercial.
En este sentido, el presidente del CCE subrayó la urgencia de retornar al trabajo de manera escalonada cumpliendo con las medidas sanitarias necesarias para proteger la salud de los trabajadores y clientes en los comercios.
Ayala Vázquez advirtió que en caso que se prolongue más la suspensión de actividades laborales el escenario económico se complicará todavía más para los comerciantes en el centro histórico con lo que el número de cierres y pérdida de empleos aumentará.
Portada y Foto: Mara González